Depósitos para recoger agua de lluvia

Es muy sencillo recoger toda el agua que cae sobre el techo de nuestros hogares, solo necesitamos una instalación que permita su almacenamiento para, posteriormente, poder usarla en diferentes tareas donde no se necesitan que las aguas estén tratadas, y para todo esto se utilizan depósitos de poliéster.

Pero... ¿por qué debemos almacenar el agua de la lluvia?

Al hacerlo, estamos ayudando a la sostenibilidad del planeta, donde el agua es cada vez más una materia prima limitada. Además, también contribuimos a la economía familiar y también la utilizamos para la limpieza general (hogar, automóvil, plantas…).

Hay estudios que demuestran que el 50% del agua que utilizamos de forma diaria va destinada a funciones que no necesitan que el agua esté tratada.

¿Cómo se recolecta este agua de la lluvia?

Lo que hacemos es captar el agua de la lluvia que cae en los tejados. Para ello, el depósito tiene que tener una serie de características, que son:

  • La capacidad del depósito debe ser la que se necesita para mantener un jardín.
  • Debe poder almacenar toda el agua de aquellas lluvias que tienen una intensidad de 150mm/hora y que duren 10 minutos sobre el techo de un hogar que mide 100 metros cuadrados.
  • Aquellos depósitos que sean pequeños, se colocan escondidos en la vegetación. Son aquellos que almacenan hasta 800 litros.
  • Se conectan con el bajante de aguas del techo de forma directa, para que cuando el depósito se llene, las aguas sobrantes sean desviadas al alcantarillado.
  • Los depósitos de mayor tamaño son enterrados en la tierra. Son aquellos que su capacidad oscila entre los 1000 litros y los 50.000.
  • Para que el agua sea usada de forma más eficiente, de puede dotar el depósito de un sistema de riesgo, formado por una bomba que está unida a un reloj que lo programa.

¿Cómo se recolecta este agua de la lluvia?

Los quimicos que pueden desprender algunas tejas de ciertos techos.

Nunca recoger agua de techos de lona o amianto.

En algunos lugares se produce lo que se conoce como «lluvia acida». Esta lluvia contiene ácido sulfúrico de la combustión del carbón.

Hay en algunos sitios que está prohibido recolectar agua para el uso domestico.

Nunca consumir agua sin tratar.